Monasterio Taktsang, conocido como el Nido del Tigre, en Bután.

Viajar a Bután: Requisitos, Consejos y Qué Ver en el Reino del Dragón

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Viajar a Bután es una experiencia única que requiere una planificación cuidadosa. El primer paso para visitar este hermoso país es obtener un visado, que solo puede ser gestionado a través de una agencia de viajes autorizada por el gobierno butanés.

Esto significa que no puedes viajar a Bután por libre, sino que tendrás que contratar un paquete turístico que incluya guía, transporte, alojamiento y comidas.

Consejos para Planificar tu Viaje a Bután

Planificar un viaje a Bután implica algunos detalles importantes. Los mejores meses para visitar Bután son de marzo a junio y de octubre a diciembre, evitando los monzones de junio a agosto.

En cuanto al dinero, es esencial llevar efectivo en ngultrum butanés, ya que las tarjetas de crédito no son ampliamente aceptadas y no se puede pagar en euros o dólares en la mayoría de los comercios.

Cómo Llegar a Bután

Llegar a Bután puede hacerse por aire o por tierra, aunque la opción más común es por aire. El aeropuerto internacional de Paro es el único aeropuerto del país con vuelos internacionales.

Las aerolíneas que operan en este aeropuerto son Druk Air y Bhutan Airlines, que conectan Bután con ciudades como Katmandú, Delhi y Bangkok. Estos vuelos ofrecen vistas espectaculares de la cordillera del Himalaya, por lo que se recomienda reservar un asiento junto a la ventanilla.

Si prefieres llegar por tierra, puedes entrar desde India a través de puntos fronterizos como Phuentsholing, Gelephu y Samdrup Jongkhar. Sin embargo, esta opción es menos común y puede resultar más complicada, especialmente para estancias cortas.

Lugares Imprescindibles que Ver en Bután

Bután es un país lleno de maravillas naturales y culturales. Paro, con su famoso monasterio Taktsang, conocido como el Nido del Tigre, es uno de los lugares más emblemáticos de Bután. Este monasterio, situado a 3.120 metros de altitud, ofrece unas vistas espectaculares y es accesible a pie o a caballo, convirtiéndose en una experiencia imprescindible para cualquier visitante.

Thimphu, la capital de Bután, es una mezcla de modernidad y tradición. No te pierdas el dzong Trashi Chhoe y el Memorial Chorten. Además, desde Thimphu puedes realizar trekkings a los glaciares himaláyicos cercanos, ofreciendo una oportunidad única para explorar los paisajes montañosos de la región.

Punakha, la antigua capital del reino, es famosa por su dzong de 1637 y su ubicación en un fértil valle. Este lugar es perfecto para disfrutar de la naturaleza y la historia en un entorno tranquilo y pintoresco. La belleza del dzong y su entorno natural hacen de Punakha un destino imperdible.

Otro lugar destacado es el monasterio de Trongsa, dirigido por un abad reencarnado, que es uno de los más importantes de Bután. Su belleza y espiritualidad te dejarán sin palabras, ofreciendo una profunda conexión con la historia y la religión del país.

El valle de Phobjikha es conocido por ser el hogar de la grulla de cuello negro en invierno, y ofrece paisajes impresionantes y una experiencia de conexión con la naturaleza. Haa Valley, un valle remoto, es perfecto para aquellos que buscan tranquilidad y autenticidad. Sus paisajes y cultura tradicional son verdaderamente únicos.

Bumthang, considerado el corazón espiritual de Bután, es famoso por sus monasterios y festivales. Es un lugar ideal para sumergirse en la espiritualidad butanesa y experimentar de primera mano la cultura y tradiciones del país. Por último, Dagana, un destino menos conocido, ofrece paisajes y arquitectura impresionantes, transportándote a otra época.

 

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